viernes, 19 de noviembre de 2010

Primeres caminates a la Patagonia: Bariloche i El Bolsón

Holes de nou!

Avui estem a Esquel, un poblet molt  petitó, on no para de bufar el vent, i on ens hem dedicat sobretot a descansar després d'uns dies caminant (sentíem que ho necessitàvem!) mentre esperem que surti el nostre "colectivo" (com en diuen aquí del bus) cap a El Chaltén.
I també volem aprofitar per posar-nos al dia amb el blog, que ja toca, per tant avui... doble ració!!

Como os dijimos, hemos decidido juntar las primeras rutas de la Patagonia en una misma entrada. Así que nos remontamos otra vez a nuestros días en Bariloche...

En algunos momentos hemos pensado que tal vez nos habíamos equivocado al elegir las fechas del viaje, pues muchas de las rutas que habíamos pensado hacer están cerradas aún por la nieve. Pero también nos han contado que en enero-febrero (verano aquí) todo está lleno de gente y en refugios en los que estos días puede haber 8-10 personas, pueden juntarse 80!! Aparte que luego "es re-caro". O sea que al final, a pesar de haber tenido que renunciar a algunas cosillas, estamos contentos porque han sido días de mucha tranquilidad en la montaña.

RUTA 1: "CATEDRAL" (2 días-18 kilómetros)

Villa Catedral (Bariloche)-Refugio Frey-Villa Catedral
Des de Bariloche vam pujar al Refugio Frey, als peus del Cerro Catedral, dins del Parque Nacional Nahuel Huapi. Va ser una ruta molt maca, d'unes 4 hores, amb vistes al Lago Gutiérrez, passos per boscos frondosos i una última pujada, entre pics nevats, per arribar al refugi, en un lloc espectacular.



Tuvimos que cruzar unos cuantos puentes...


Ya véis que nos cuidamos;-)


La última subida antes de llegar al refugio (que puede verse al fondo).
Y cuando ya nos estábamos arrepintiendo de haberla cargado durante casi 2 meses... por fin dormimos en la tienda!! 
En Bariloche nos compramos un par de esterillas y dormimos "re-bien";-)  y es que el entorno era mágico. Aquí no puede hacerse acampada libre, pero sí que te dejan dormir fuera de los refugios en zonas concretas, "de gratis" o pagando muy poco. 
En el Frey había un montón de "vivacs"  ya montados para resguardarse del viento, pues allí pega fuerte. Aún así tela cómo soplaba por la noche! (a las tantas de la madrugada: "Antonio, tú crees que puede salir el toldo volando?"... y Antonio seguía roncando... jajaja). Pero no se desclavó ni una piqueta!:-)



Últimos momentos empapándonos de las vistas y la paz de la Laguna Toncheck (que estaba prácticamente helada) y las agujas del Cerro Catedral...

... y otra vez pa'Bariloche!

EL BOLSÓN



Des de Bariloche vam baixar cap a El Bolsón, un poblet també molt petitó que té un mercat "re-re-re-re-hippy"!! (gent passejant descalça, vestits a lo hippy  total, asseguts a terra, amb mil collarets de colors, etc.). Estava ple de paradetes d'artesania feta amb cuir, fusta, dolços tradicionals (és una zona amb un microclima molt càlid que fa créixer molta fruita silvestre de la que en fan tot tipus de "dulce" i mermelades), artesania mapuche (les comunitats indígenes d'aquí) i també puestecitos de cervesa artesana. 
A mi els ulls em feien "xirivitas" amb tanta paradeta;-) i tot i carregar les 2 motxilles (quan vam arribar  amb el bus al poble ja estaven desparant) no vam poder estar-nos d'anar-hi a fer un volt abans de buscar allotjament... 

Donde nos hospedamos, otra vez en un hospedaje familiar, también tenía un aire muy acogedor y un poco "hippy". Era una casa con un altillo y habitaciones de madera, de una señora, la Nora, que des que los hijos se fueron de casa alquila habitaciones a turistas. Y por la mañana nos despertábamos con música clásica, y preparaba unos desayunos con tostadas con "dulce" casero (melmelada) de rosa mosqueta y moras, deliciosas (sí, ho reconeixem, no podem deixar de parlar de menjar!! ens estarà pujant el sucre al cap? jajaja). 



RUTA 2: "HIELO AZUL" (3 días-35 kilómetros)

Des de El Bolsón vam fer una ruta de tres dies, uns 35 kilòmetres de puja-i-baixes per camins que uneixen diferents refugis al voltant del Cerro Hielo Azul i el Río Azul.

El Bolsón-Refugio Hielo Azul
Empezamos cruzando el río Azul por un puente muy auténtico de peli de Indiana Jones que se movía bastante, pero muy seguro. Y después tuvimos cerca de 5 horas de subida, entre bosques al refugio, de las que casi no tenemos fotos porque entre  el peso de la mochila y la cuesta no teníamos ni ánimo de hacer, llegamos chorreando!


Eso sí, el camino estaba muy bien indicado, y las "señales" incluso te animaban;-)




La recompensa vino por la noche. En el refugio encontramos a dos argentinos muy majos que también se alojaban en casa de Nora, Enzo y Gustavo. Juntos hicimos un fuego y charlamos  hasta tarde, bebiendo cervecita artesana que vendían en el refugio, haciendo tostadas para cenar, etc. (quién nos iba a decir que incluso sin tener hornillo, porque tantas cosas ya no podíamos traernos de casa, comeríamos caliente). 

En el parque nacional de Huerqueue hicimos un descubrimiento gastronómico, el "atún a la barbacoa". 
Unos israelitas que conocimos nos enseñaron cómo hacer este delicioso plato para la montaña: se abre la lata y se cubre con un trocito de papel higiénico que al impregnarse del aceite, está preparado para encenderse. Durante 5-10 minutos hay que dejarlo que queme,  utilizando este tiempo para calentarnos  las manos o hacer otros platos "al infierno", pan, chorizo... esto del infierno es idea de Antonio y sus recuerdos de la infancia;-). Cuando ya se ha consumido el aceite, podemos comernos el atún que sabe a gloria, y además calentito! 
Éste es un recurso digno del "manual de jóvenes castores",  eh? jeje. 
Después del atún, probamos una variante "mu malagueña", con una lata de sardinas que llevábamos, y nos hicimos nuestros particulares "espetos". Como en casa! como diría el @flamenquín;-)










Refugio Hielo Azul-Refugio Natación-Refugio Cajón del Azul
En el segundo día el recorrido se dividía en dos partes. Primero pasamos por lagos helados y zonas con bastante nieve, paisajes solitarios pero con mucha paz... y después "sufrimos" un descenso de 1000 metros hasta el valle del río Azul, donde estaba el último refugio, bastante largo y cansado, llegamos  caminando "a lo chiquito de la calzada", jeje.









En el refugio Natación, delante del lago del mismo nombre que estaba medio helado, había una pequeña piragua del refugiero que no dudamos en probar!

"El instructor", disfrutó como un niño chico, la verdad es que tenía arte al bajarse y subirse de la piragua;-)
"La alumna aventajada", jeje, que es noti que sóc de Banyoles!!:-)



Sudando la bajada...
Aunque acampamos en el refugio Cajón del Azul, cenamos allí con nuestros compis argentinos, y también echamos unas partidillas de ajedrez...


Refugio Cajón del Azul-El Bolsón
Después de amanecer en este entorno tan idílico, fuimos bajando siguiendo el río Azul, ahora entenderéis el porqué de su nombre.











Mmmmm:-)
Nuestra última tarde en El Bolsón, agotados después de 3 días de ruta, fue de futbol y comilona. Gustavo nos hizo un bife a la criolla bueníssimo, mientras mirábamos el derbi del año, Boca-River, por la tele. Ganó el River, y después del partido un montón de gente salió a celebrarlo a la calle, pitando con los coches, cantando... y mira que el pueblo era pequeño!


Y aquí terminamos por hoy. En un par de horitas salimos para El Chaltén, paraíso de los andinistas. Nos esperan 24 horas de bus por la mítica RN-40, típica carretera patagónica, nos han dicho que en bastante tramo aún es de ripio... pero que vale la pena recorrerla porque son kms y kms solamente de paisaje. 
En la próxima entrega esperamos poderos enseñar el Fitz-Roy, ya que dicen que  a menudo no puede verse por el mal tiempo, cruzaremos los dedos para que pillemos un día despejado (y no nos pase como con el Aconcagua).

Esperamos que estéis tod@s bien i que tengáis muy buen fin de semana!
Una abraçada ben forta a tod@s y hasta pronto!






De Bariloche a Pucón, entre lagos y volcanes

Hola gente!!

Des de l'última entrada, hem començat a saborejar l'encant de la Patagònia, i mai millor dit, perquè els poblets d'aquí estan plens de xocolateries impressionants...

Después de Mendoza fuimos a Bariloche, ya entrando en la Patagonia, un pueblo todo verde, al que llaman la Suiza argentina. Y realmente allí tuvimos la sensación de estar en algun país de Europa central: ya que se caracteriza por sus casitas de madera con flores en los balcones, un paisaje completamente verde (y más aun ahora, que ya es primavera) con los Andes nevados de fondo, y su enorme lago Nahuel Huapi, que hace que en el pueblo corra constantemente el viento (del calor de Mendoza volvimos al frío!). Y, como os decíamos, un montón de tiendas super monas de madera, con dulces y chocolates de mil formas y colores diferentes... no nos cansaríamos nunca de comer;-) com diu ma germana, arribarem ben rodanxons, jeje.

A Bariloche vam fer, com nosaltres diem, vacances de les vacances.  I és que vam decidir llogar un cotxe per recorrer la zona dels llacs entre Argentina i Chile (descansant dels autobusos), vam dormir en una cabanya de troncs xulíssima (descansant dels hostels habituals), vam seguir els nostres propis horaris (descansant de controlar tots els horaris de busos)... O sigui que el cotxe ens va permetre tenir molta llibertat, voltar per tot arreu i també arribar a llocs on no arribem amb el bus, buscar  i rebuscar allotjament, o parar-nos al mig de qualsevol lloc perquè és espectacular. En total van ser 4 dies, 900 kilòmetres, 2 països, 4 parcs naturals i un piló de llacs!!!

1er día: Bariloche-Villa La Angostura- San Martín de los Andes
Desde Bariloche seguimos la carretera de los 7 lagos, en dirección a San Martín de los Andes. Una carretera preciosa, al borde de los lagos, con muchos kilómetros de ripio (es decir, sin asfaltar y básicamente de gravilla), que te obligan a conducir despacito... disfrutando del paisaje de los diferentes lagos.
Es una zona donde se practica mucho la pesca, y hay la típicas cabañas de guardaparques, como en las pelis;-)

En el pueblo que queda a medio camino, Villa La Angostura, pillamos una triatlón popular, y fue bonito ver a gente de todas las edades llegar con piragua por el lago, y cruzarnos a otros/as que iban en bici o corriendo. 
Como en muchas carreras populares había puestecitos de comida de asociaciones del pueblo (nos faltó tiempo para comprar algo, jeje), aunque Antonio se quedó con las ganas de provar el choripan (o sea, bocata de chorizo, que aqui es una especie de butifarra a la brasa) que estaba reservado para los participantes (hay que decir que tenía una pinta!).





La preciosa ruta de los 7 lagos... de lago a lago...







Para pasar la noche tuvimos la suerte de encontrar una cabaña de troncos  muy chula, que nos salió baratísima, con sofá y 2 teles!! Era todo de madera, super acogedora. Luisa, fliparías aquí;-)
 



2º día: San Martín de los Andes-Junín de los Andes-Pucón (Chile)
En Junín, un olor a carne nos llevó hasta una braseria donde a Antonio se le caía la baba... y por fin se quitó la espinita del choripán;-) o sea que hicimos un picnic "re-bueno". Aquí, cada vegada que et poses a menjar al carrer, apareixen gossos de sota les pedres!!

El paso a Chile desde Junín pasa por una carretera, parte de asfalto, parte de ripio, pero con paisajes hermosos, siempre con vistas a los Andes y al mítico volcán Lanin.  
En la frontera, aparte del papeleo que tienes que hacer en ambos países, (lo que hemos ganado en Europa en este sentido!), en Chile son bastante estrictos con lo que se entra al país, y no dejan que pases fruta, embutido,leche... (para prevenir ciertas epidemias). Total, que nostros que llevábamos naranjas, manzanas y mortadela, nos quedamos sin ná! le preguntamos al hombre si podíamos comerlo allí, y nos dijo "que no, porque ya estábamos dentro del país" comorr?? empezó a contarnos que lo queman en unos recipientes especiales y bla, bla, bla... Al final aparecieron unos plátanos que llevábamos, bastante maduros, sin muy buena pinta, y va y dice "eso si queréis, ya os lo podéis comer" (y nosotros pensamos: pillín, eso ya no te gusta, eh? jajaja).

La carretera a Chile, con el espectacular volcán Lanin de fondo. Aunque queríamos hacer una caminata allí, la nieve que aún hay nos lo impidió:-(






















Fue curioso cuando vimos una señal que nos indicaba "obstáculo peligroso en la carretera" y al cabo de unos metros nos encontramos con esto;-)





En Chile estuvimos en Pucón, un pueblito también todo de madera, a los pies del volcán Villarrica (que está activo, se podía ver incluso la humareda). 
Vam estar allotjats en un hospedaje familiar, que aquí és molt habitual, on convius amb la família, pots utilitzar la seva cuina, el menjador... i ells et lloguen una habitació amb bany. Estàvem a casa la Sra. Gladys, una senyora gran una mica estricta ("ducha sólo una vez al día y de 10 minutos máximo, eh?") però maca, esmorzava amb nosaltres explicant-nos curiositats i historietes de gent que ha tingut a l'hospedaje.


A l'Ajuntament de Pucón hi ha fins i tot un semàfor d'alerta volcànica

































3er dia: Pucón-Parque Nacional Huerqueue
Des de Pucón vam fer una rutilla d'un dia al Parque Nacional de Huerqueue, una zona de llacs i cascades amagats entre boscos d'araucarias altíssimes, on vam quedar enfangats fins a les orelles!



El lago Tinquilco i el volcán Villarrica al fondo, desde el camino de subida a los lagos.


4º día: Pucón-Bariloche

El último día fue básicamente de vuelta a Bariloche, parando a comer con vistas en algún laguito... y disfrutando mucho de escuchar  por fin nuestra musica en el coche; al final sirvió de algo "cargar" los cds! Manel, Delafé, Sabina&Serrat... han sido nuestra banda sonora de estos días de carretera y lagos:-)




Ya en Bariloche, y otra vez sin coche, estuvimos disfrutando de la ciudad y de sus vistas. Subimos al cerro Campanario, un montecito desde el que según el National Geographic hay una de las 8 mejores vistas del mundo. Juzgad vosotr@s mism@s!










En Bariloche repetimos la experiencia de hospedaje familiar, esta vez en casa de una chica joven que comparte su casa con turistas... y delante del lago! un lujo:-)

Es curioso pero desde que estamos viajando por Suramérica, hablando con la gente, nos han atribuido un montón de nacionalidades diferentes. Cuando estábamos en Perú y Bolivia, nos preguntaban un montón de veces si éramos argentinos o chilenos. Y aquí, quizás por nuestros acentos andaluz y català, nos han dicho muchas veces si éramos chilenos, brasileños, etc. Pero la mejor fue una mujer chilena que nos preguntó si éramos jamaicanos!!¿¿?? jajaja

Aunque aquí no termina nuestra experiencia en la zona de los lagos (desde Bariloche también hicimos una ruta de dos días a un refugio de montaña), aquí os dejamos, de momento... la siguiente entrada será "monográfica" de las primeras caminatas en la Patagonia.

Molts petons a tots/es i fins aviat!